¿¡SEX EDUCATION!?

Hola a todos!

Vivir en el siglo XXI nos ha traído muchos avances en diversas cosas, pero en otras parece que sigamos viviendo como hace tres siglos. No creo que sea algo que se me pueda negar, ya que, pese a vivir en pleno siglo XXI, aún hay muchos adultos que se llevan las manos a la cabeza cuando desde los centros escolares se plantean actividades de educación sexual, llegando a pedir la autorización de estos en algunos casos para que sus hijos puedan asistir. El tema genera tal debate que en algunas comunidades se ha llegado a proponer el pin parental, una política educativa que permite a los padres decidir a qué contenidos educativos acceder.

Llegados a este punto queridos lectores os querría hablar de los tres ámbitos de la educación: la Educación Formal, la Educación no Formal y la Educación Informal. La educación formal es la educación reglada, ajustada a un currículum e impartida en instituciones. Es intencional. La educación no formal es una educación igualmente intencional pero que no se imparte en instituciones. Este tipo de educación es en la que trabajaré en el futuro como Educadora Social. Por último tenemos la educación informal, esta es una educación no intencionada que se aprende en la vida cotidiana, ya puede ser en casa, con los amigos, en internet,... Para que os hagáis una idea, aquí os dejo la capacidad que ocupa cada tipo de educación en nuestro aprendizaje: 

Fuente: elaboración propia

Como podéis ver, la educación informal ocupa una franja de mayor tamaño en nuestro aprendizaje. Por lo que viendo esto, ¿cómo dudar de la necesidad de reforzar la educación formal e informal?. En el siglo XXI internet desempeña un papel de peso en el aprendizaje de muchas cosas, entre ellas la educación sexual. El aprender algo no solo tiene por qué ser un buen aprendizaje, si no que también puede ser uno malo. Hoy en día los preadolescentes y adolescentes suelen recurrir a páginas pornográficas cuando despierta su deseo sexual, y ahí es donde van aprendiendo conductas que llegarán a reproducir en su vida sexual. Creo que aquí todos estamos de acuerdo en que no puede ser así y que los adolescentes deben de recibir una buena educación sexual para eliminar los problemas que la pornografía conlleva tanto en su futura vida sexual como en sus relaciones de pareja.

Antiguamente el papel de educación sexual recaía sobre la Iglesia (en el caso de España), pero con el avance de los tiempos y las nuevas formas de relacionarse, ha ido desvinculándose la Iglesia de ese papel y es lo que ha llevado a los adolescentes a buscar la información en otras fuentes. 

La UNESCO declara que: "Estudio mundial concluye que la educación sexual de amplio espectro es esencial para la igualdad de género y la salud reproductiva". Con la educación sexual también se prevendrían las ITS (infecciones de transmisión sexual) y los embarazos no deseados en adolescentes.

Muchas veces en los Institutos se trata este tema sólo de cara a las enfermedades de transmisión sexual o a los embarazos no deseados. Esto es algo importante a tener en cuenta, pero muchas veces se cae en el error de sólo trabajar estos temas y aparte, de cara a las parejas heterosexuales, no homosexuales. 

Hay otros muchos temas relacionados con el acto afectivo sexual que se deberían de trabajar en las aulas. El primero sería contemplar todo tipo de parejas, ya no sólo heterosexuales sino

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que también homosexuales ya que, pese a que entre ellos no pueden quedarse embarazados, no están exentos de contraer una ETS. Se deberían trabajar también los miedos e inseguridades de los preadolescentes. A veces los medios de comunicación o la propia pornografía que consumen les hace tener una expectativa muy alta acerca de lo que va a ser una relación sexual, y esto les lleva a tener miedos o inseguridades acerca de sus cuerpos, cosa que debería de trabajarse también en las charlas y talleres que se realicen sobre educación sexual. Es importante trabajar esto para evitar otros problemas más allá de lo que son los embarazos no deseados y las enfermedades de transmisión sexual ya que, con el consumo de pornografía, los niños aprenden a cómo tratar a su pareja, y la pornografía heterosexual muestra una clara dominancia del hombre sobre la mujer, lo que podría derivar en futuros casos de violencia de género.

La educación sexual tiene que cambiar e irse ajustando a los tiempos y necesidades de los 

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adolescentes. No se pueden ignorar las diferentes orientaciones sexuales de estos, y debe ofrecerse información para todos ellos., al igual que trabajar el tema de la autoestima e inseguridades de cara a una relación sexual. Estas charlas no deberían ir sólo dirigidas a los preadolescentes y adolescentes, si no que también a los padres. Muchos pensaréis que es una tontería, pero de la ignorancia de los adultos vienen ideas absurdas como las del pin parental. Los padres deben saber que los tiempos están cambiando y tienen que ser capaces de brindarles apoyo y seguridad a sus hijos de cara a una relación afectivo-sexual ya que, como dije al principio, el instinto sexual está ahí porque es parte del desarrollo, y no va a desaparecer con el tiempo.

Pese a que el instinto sexual empieza a desarrollarse en la pubertad, no es necesario empezar ahí la educación sexual, ya que esta puede empezar a trabajarse antes, incluso desde preescolar. Muchos pensaréis que esto es una tontería, pero el empezar a enseñarles a los niños cuales son sus zonas íntimas y que nadie puede tocar, e ir trabajando este tipo de valores puede prevenir futuros problemas. Aquí os dejo un artículo interesante que habla acerca de esto y de cómo en la infancia también puede haber deseo sexual.

No podía dejar pasar esta entrada sin hablar de dos series que están cambiando la perspectiva de la educación sexual de cara al público adolescente. La primera de ella es Sex Education, donde se trabajan temas de cara a la educación sexual ya sea en parejas heterosexuales, homosexuales, bisexuales,... Aparte, también se habla de la identidad de género y hay otros temas como por ejemplo el feminismo. Otra serie podría ser la de Euphoria, que trata diversos problemas adolescentes, entre ellos la orientación y educación sexual, aparte del tema de las drogas, la violencia de género, el concepto de belleza,...

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Vosotros lectores qué pensáis, ¿La educación sexual se enseña mal? ¿Podría mejorarse? ¿Veis necesario el empezar a trabajarla desde Educación Infantil?