¿QUÉ SON LOS PISOS TUTELADOS?

Hola a todos!

A muchos de los que me leéis os sonará lo que son los centros de menores, pero, ¿alguno sabe lo que son los pisos tutelados?

La finalidad de los pisos tutelados es que sus usuarios lleven una vida plena e integrada dentro de la sociedad, ¿pero quienes son los usuarios de estos pisos? Las personas que pueden residir en ellos son muy variadas ya que estos comprenden tanto a niños y adolescentes como a personas mayores, e incluso, hay pisos tutelados dedicados a personas con alguna discapacidad intelectual o física. 

Dependiendo de qué usuarios vivan en el piso se trabaja con ellos de una forma u otra, pero lo que hay que destacar es que, pese a que se siga en todos ellos una organización similar a la de una familia, no son el sustitutivo de estas. 

En el caso de los menores, suelen ser niños y adolescentes desamparados, y los pisos tutelados son una opción para estos chicos, al igual que los centros de menores. La Junta de Extremadura tiene pisos tutelados dedicados a ellos. Para que un niño o adolescente resida en uno de estos pisos, debe de cumplir un perfil; son menores que tengan que estar internados un largo periodo de tiempo y que no dispongan de una familia que se pueda hacer cargo de ellos, grupos de hermanos, para no romper su vínculo fraternal, menores procedentes de una medida protectora que implique una convivencia familiar, o menores con los que hay que trabajar de cara a una separación o unión familiar. Las edades de estos chicos deben comprender entre los 7 y los 18 años, pero siempre cabe lugar a las excepciones. Los principales objetivos son, que estos niños no estén mucho tiempo dentro de estas instituciones, favorecer su adaptación social, y en el caso de que sean hermanos, reforzar ese vínculo fraternal si fuera necesario. La diferencia que tienen estos pisos con los centros de menores es que acogen entre 6 y 8 menores por piso. A parte de esto están atendidos y supervisados por un personal cualificado las 24 horas del día, todos los días del año. Si pincháis aquí podréis ver los pisos tutelados dedicados a menores que hay actualmente en Extremadura. 

Otro tipo de pisos pueden ser los pisos tutelados dedicados a personas de la tercera edad. Estas personas pueden acceder a los pisos si tienen más de 65 años. Estos pisos están dedicados a personas mayores que, pese a entrar en la ancianidad, quieren seguir gozando de cierta autonomía, pero sin llegar a ser una carga para sus seres queridos. En estos pisos se les brinda todo tipo de servicios ya sean servicios médicos, pues tienen una enfermera a su disposición que se encarga de sus necesidades sanitarias y de la administración de la medicación pertinente, servicios de alimentación, con comidas preparadas de acuerdo a sus dietas, también cuentan con un servicio de limpieza, opcional para aquel que lo requiera, al igual que un servicio de mantenimiento de las instalaciones en caso de avería, y por supuesto, un servicio de vigilancia y atención las 24 horas del día. Los pisos tutelados para estas personas a mi me parecen una gran opción, sobre todo para aquellos mayores a los que su familia deja de lado y no pueden costearse una residencia o no quieren estar en una ya que al igual que los pisos de menores, a estos pisos los subvenciona la Junta de Extremadura. Pese a todas estas comodidades, estas personas al igual que pasa con los pisos de menores, ayudan en las tareas del hogar diarias de la forma que les es posible.

Por último os quería hablar de los pisos tutelados dedicados a personas con alguna discapacidad intelectual o física. Estos pisos están pensados para que las personas que tengan algún tipo de discapacidad puedan gozar de cierta autonomía. El que vivan en estos pisos favorece su integración y su participación en la vida social y comunitaria, les aporta experiencias imprescindibles apropiadas para cada edad, y se les ofrece un servicio especializado con atención sanitaria, asesoramiento psicológico y recursos laborales, de formación y de ocio. Las viviendas dedicadas a estas personas pueden ser de dos tipos: viviendas tuteladas supervisadas, para aquellas personas que han sufrido una discapacidad recientemente. De esta forma, se les enseña a que lleven una vida normal y plena adaptada a esa discapacidad. Otro tipo de viviendas son viviendas tuteladas de apoyo, para personas que van a estar viviendo en esos pisos durante más tiempo. Para acceder a estos pisos, los demandantes deben de tener una discapacidad igual o superior al 33%, y tener una edad comprendida entre los 18 y los 50 años,

Espero haberos dado a conocer con esta entrada los diferentes tipos de pisos tutelados que hay, y la magnífica labor que se lleva a cabo en ellos ya que no sólo intervienen educadores sociales sino que también enfermeras, psicólogos, todo tipo de personal necesario para atender las necesidades de los usuarios. ¿A vosotros qué os parecen los pisos tutelados? ¿Habíais oído hablar de ellos alguna vez?